Los problemas de copyright en la red y ahora también en youtube

Les tengo que comentar que hoy por la mañana me deshice de casi todos los videos que tenía subidos en mi canal de youtube. Estoy muy de acuerdo con que, si uno sube una música y el autor o quien posee sus derechos (o los derechos de interpretación de esa obra en particular) protesten, como me ocurrió por primera vez con una de las obras del gran y casi desconocido compositor canadiense Claude Vivier (1948-1983), que, como han podido ver, ya ni siquiera vive.
     Añado ahora que me acaba de escribir una española para preguntarme sobre uno de los videos que subí sobre Claude Vivier. Aclaro que yo compré esos DVSs porque me interesa mucho el compositor y su obra, y estoy seguro de que los verdaderos interesados no se conformarán con bajar de internet o ver en Youtube. Esta mujer me escribió esto, cuando le expliqué la situación: No sé si saben que algunos hemos aprendido mucho más con el material que hay en internet que yendo al instituto.
Muchas gracias por responderme y por compartir mientras pudiste : )
     También como cuando cuando la compositora Hildegard Westerkamp protestó ante el sello Empreintes Digitales (que se especializa sobre todo en música concreta, es decir, un género de música minoritaria) porque yo subí uno de los tracks de su disco Transformations, dando todas las referencias de ella, el disco y la página del sello (sólo subí "Beneath The Forest Floor" y no el disco completo).
     Sí, son los autores o los responsables de los sellos que los han descubierto, promovido, trabajado por sus obras, aunque me queda un poco la inquietud de por qué estos autores o intérpretes no ven con buenos ojos que alguien se interese por su trabajo al grado de gastar horas en la elaboración de videos (porque, quienes los han hecho con seriedad, saben que se invierten horas en esto).
      Luego, lo confieso, subí algunas películas, sobre todo no comerciales, de arte, de ésas que nadie ve o pocos conocen, y que no están por lo general disponibles fácilmente. Aquí desde luego estoy todavía más de acuerdo en que, cuando subí la película Ping Pong, del alemán Matthias Luthardt, me haya escrito la empresa cinematográfica para bajar el video, cosa que hice de inmediato, o como cuando subí la todavía tan polémica y mal entendida Salò de Pier Paolo Pasolini, indicando a youtube, al subirla, que en ella había escenas de violencia y desnudos, para que ellos mismos impusieran una restricción de edades a las visitas: pero no hicieron nada: sólo, cuando algún santurrón se quejó, me informaron que quedaba desactivado mi video por infracciones a las reglas de la comunidad, sin siquiera poder argumentar que yo mismo había emitido esa advertencia al subirlo. Me informaban, además, que en otro caso similar, me cancelarían la cuenta.
     Hace unos días, me enteré del gran poder poético de la película Le Quattro Volte, de Michelangelo Frammartino, y la pude bajar y decidí subirla. No duró mucho. Me llegó una notificación de que se desactivaba ese video por reclamos de los propietarios. Y eso que se trata de una película de la que siempre leemos "ha sido multipremiada, pero casi nadie sabe nada de ella". Muy bien, entiendo, porque yo mismo soy autor de libros, y nada me molesta tanto como ver que alguien toma un fragmento o párrafo o información de lo que me llevó años escribir para publicarlo, sin citas, en wikipedia o en páginas de cualquier tipo. Incluso tuve un problema con un muchacho que hizo un proyecto de no sé qué y agarraba párrafos completos de un artículo mío publicado en un libro en 2003 y citaba todas mis fuentes, menos a mí. Los escritores, a diferencia de los músicos y cineastas, tenemos con frecuencia que contentarnos con que pongan nuestro nombre y el título de la obra. No mucho más.
      Luego, ya en el tema de la música incidental, bajé la telenovela Imperio de Cristal para analizar el uso de la música y su desplazamiento cuando tuvieron que cambiar todos los temas de discos comerciales para introducir la música compuesta por Jorge Alberto Sánchez. Ya que la había bajado (sí, pagando con una cuenta en Megaupload), y viendo que no estaba en youtube, la subí, aunque sobre todo con fines de análisis de estos temas. Incluso mis descripciones eran "Música acreditada para este capítulo" y ponía la lista de ese capítulo. Luego, como hace tiempo pude comprar en DVD la telenovela De frente al sol, y también me interesa analizarla musicalmente, también la subí en largos videos de 4 horas (lo que duraba cada dvd).
      Pero, tras lo ocurrido en Megaupload, las cosas en internet se han vuelto espantosas. Hoy por la mañana vi que mis videos compilatorios de temas detectados de las telenovelas Capricho, Quinceañera y Cuando llega el amor estaban bloqueados en más lugares del mundo. En esos videos, sólo para recordarlo, ponía yo por lo general 01:30 de duración de cada tema, con información por escrito del autor, título, álbum y, abajo, para qué personaje o situación habían sido usados. Bueno, hoy, por sólo comentar un caso, vi que el de Cuando llega el amor presentaba la siguiente advertencia:

Es posible que tu video, 36 temas usados como música incidental en la telenovela "Cuando llega el amor", incluya contenido que pertenezca a estas entidades o esté administrado por ellas:

• Entidad: Believe y The Orchard Music Tipo de contenido: Grabación de sonido
• Entidad: SME Tipo de contenido: Grabación de sonido
• Entidad: Koch Entertainment Tipo de contenido: Grabación de sonido
• Entidad: The Orchard Music, Kontor New Media, y IODA Tipo de contenido: Grabación de sonido
• Entidad: UMG Tipo de contenido: Grabación de sonido
• Entidad: IDOL (Independent Distribution On Line) y Koch Entertainment Tipo de contenido: Grabación de sonido
• Entidad: EMI Tipo de contenido: Grabación de sonido

     Entonces decidí eliminar todos los videos subidos por mí que en los próximos días pudieran traerme problemas. Estoy agradecido a youtube, ya que me ha favorecido con una cuenta donde puedo subir videos de más de 15 minutos, y deseo conservarla, porque antes que todo este trabajo de investigación sobre la música incidental, y mucho antes del deseo de compartir la música o películas que me han marcado, está mi propio trabajo experiemental con la literatura y ciertos tipos de géneros musicales experimentales que he ido descubriendo casi de manera solitaria, por mera necesidad expresiva.
     Sólo me pregunto, ahora, cómo podremos seguir en este grupo haciendo investigación de la música incidental que fue usada, en su momento, por Televisa sin acreditar (no sé si pagando sus respectivos derechos de autor o no, porque ellos sí las usaron, esas músicas, con fines de lucro en su momento, tanto que es por eso que muchas telenovelas no han podido salir en DVD, por más exitosas que hayan sido, o algunas otras han salido desastradas, como Cuna de lobos, donde se recurrió a muy digna música de librería para que sirviera de borrador de los temas incidentales que Televisa no tenía derecho de explotar comercialmente, y entonces ni escuchamos los temas originales (pese a que pagamos por el caro DVD) ni pudimos tampoco apreciar en su justo valor la música-borrador vilmente usada). Es por eso que de la muy exitosa Cadenas de amargura, que por cierto, están retransmitiendo justo ahora (porque hay gente que me dice: es un fenómeno del pasado, no tiene caso que protestar por algo que pasó hace 20 años o más) no ha sido vendida en DVD, como muchos piden: porque toda su "banda sonora" fue ajena. No hay en Cadenas de amargura un solo tema propio: acaso solamente podríamos considerar 'propios' los temas de librería en el tema de entrada y los temas cortos de Evangelina Vizcaíno. Pero, por lo demás, se trata de al menos 25 discos de música comercial independiente de la telenovela. Sería un verdadero horror ver cómo harían un dvd de Cadenas de amargura intentando ocultar el suspenso de Tangerine Dream o los temas emotivos de Rondò Veneziano, por decir algo.
      La pregunta, insisto, es: ¿cómo vamos a continuar con esta investigación, que no tiene el menor afán de lucro, y que sólo pretende conocer y dar a conocer el rompecabezas armado? ¿O hay que olvidarnos del verbo compartir y buscar en este grupo de manera privada y quedarnos escuchando los temas que alguna vez alguien hizo invadir nuestras casas y nuestro espíritu?
      Estamos a punto de terminar la lista de temas de Cadenas de amargura (ya casi llegamos a los 100 temas usados) y esperamos poder, ya no publicar un video con los fragmentos de toda la música usada, porque de seguro nos lo bloquearían, sobre todo porque estamos hablando de alrededor de 100 temas encontrados y no de 29, como en Quinceañera o de 36 en Cuando llega el amor. Esperamos poder compartir con los seguidores de Cadenas un archivo descargable y la correspondiente lista de análisis de cada tema: su nombre, su autor, el álbum del que fue tomado, y su uso, incluso en qué capítulo lo escuchamos por primera vez. Esperamos. En el último de los casos, publicaremos sólo la lista, pero esperamos que sea posible hacer todo como nos lo planteamos desde un comienzo.
        En el caso del sello de música concreta, electrónica, experimental Empreintes Digitales, el dueño del sello me insinuó en el correo donde me pedía que retirara el video de una de sus compositoras que ya ellos estaban comenzando a pensar en una estrategia de difusión muy similar a la que yo estaba haciendo, y entonces le dije "Oh sí, sería genial que Empreintes Digitales publicara esta música que de inicio es minoritaria, pero que, puedo asegurarlo, interesa de verdad a muchos. Ojalá que lo hagan. Y eso mismo sería aconsejable pedirle a las disqueras y demás: que den a conocer, que compartan. No pueden cerrarse en su torre de "cómprame, mírame o escúchame pero no me toques". Los productos culturales pertenecen a la cultura incluso más que a sus creadores, eso debe entenderse ya. ¿Qué va a pasar con esas formas de creación que se basan precisamente en tomar fragmentos de otras composiciones musicales y alterarlas -incluso esta técnica creativa tiene nombre y documentación?
    Claro, uno no tiene por qué ponerse de difusor de la música o la obra de no sé quién, pero quienes la difunden deben entender que el mundo ha cambiado, y que la gente necesita saber. Y que muchas veces es muy difícil o casi imposible resolver las cosas simplemente comprando un CD.
     A ver, ahora, los interesados en la supuesta "banda sonora" de Cadenas de Amargura, vayan a la tienda más surtida de México y díganle al dueño: quiero toda la música de Cadenas de Amargura. Eso no existe. Se trata -por lo que hemos visto hasta ahora- de al menos 27 discos, unos todavía conseguibles, otros ya no. Imposible entonces tener la "banda sonora" de esta telenovela (ni casi de ninguna otra) si no hay de por medio un estudio, un análisis, esfuerzo detrás, casi detectivesco, y un compilatorio.
     Les cuento, sólo para terminar, lo más ridículo que me ha pasado en estos temas: suelo hacer grabaciones en mi pueblo de lo que se llama "paisaje sonoro" (soundscape), y grabé audio de un establo cercano a mi casa, donde los que ordeñan escuchan el radio, luego lo procesé de algún modo no definitivo y lo subí en lo que llamo "video acusmático", y pues, lo obvio, ya me llegó notificación de infracción de copyright... ¿Deberé, la próxima vez que desee grabar paisajes sonoros, pedirle a la gente que por favor apague su radio? ¿Se verá comprometida esta inquietud porque se escucha por ahí Rocío Durcal o Juan Gabriel?
        Las políticas cambian, estamos de acuerdo. Pero hay otras cosas que también deberían cambiar, al menos para bien, como el derecho a la información. O, como nos dice Youtube (contra el que, insisto, no tengo ninguna queja, al contrario), impugnar. Decir: "Youtube: ese video lo grabé de lo que se oye en mi pueblo o aquel otro video lo subí con esa música porque simplemente estoy haciendo investigación y compartiendo lo que Televisa hizo hace años...". Muchas cosas son las que se tendrán que contemplar. No se puede ir parejo. Pero reconozco que es un tema polémico, complejo.
        Así que pido una disculpa a quienes se llegaron a suscribir a mi canal por alguno de los videos ahora eliminados.